La extracción de monacita en Campo de Montiel conllevaría el desarrollo de toda una cadena de valor alrededor del mineral, haciendo viable un proyecto industrial y de atracción de fondos europeos. Se crearía en la región un polo de innovación, investigación y desarrollo en torno al neodimio, además de plantas industriales para el tratamiento, la separación y el refino de esta monacita e incluso plantas de fabricación de imanes permanentes en los polígonos de la zona.
Los imanes permanentes son claves para la nueva industria que Europa quiere impulsar, pues los necesitan los motores de los vehículos eléctricos, desde un patinete hasta un coche, o los aerogeneradores.
En el gráfico adjunto pueden verse las diferentes fases de la CADENA DE VALOR que se desprenderían de la explotación de la monacita.
Este proyecto encaja perfectamente con el espíritu y los objetivos de los planes autonómicos para la reindustrialización vinculada a la transición ecológica y digital en la Región.
NOTA: Es incuestionable la necesidad de gestionar responsablemente la aceptabilidad y gobernanza social de todo proyecto con impacto en el territorio, en general, y los extractivos, en particular, por la gran sensibilidad social a su impacto medioambiental. Esto debe hacerse mediante un proceso abierto y transparente que responda a las inquietudes y expectativas de las poblaciones y colectivos afectados y exponga, con claridad, los retos, en términos de riesgos y beneficios, que para estos actores conllevaría el desarrollo del proyecto extractivo o industrial.
Hay que señalar, que esa participación social tiene como primer instrumento la transparencia del proceso la consulta pública en la que se inscriben las alegaciones comentadas en este escrito.
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